Si te dicen que caí.

Un libro triste, muy triste. Unas cuantas vidas unidas por la derrota. Unos niños que quieren olvidar la derrota de sus padres, y que acabarán también derrotados. Unos adultos que, como si fueran niños, creen que la victoria todavía es posible. Unos vencedores tan miserables que no pueden escapar de la derrota que oprime a los que ellos vencieron.

La zafia publicidad de Intereconomía.

La TDT me permitió hace un par de días ver un anuncio de Intereconomía. Aparecía una foto de Churchill con un rótulo en el que ponía "Conservador". A continuación, una foto de Stalin con el rótulo de "Progresista". Para acabar, salía un letrero en el que decían algo así como que tenían calro a quién elegir. Es lo que pasa cuando se es tan estúpido como para establecer estadísticas con poblaciones de sólo dos elementos. Si los elementos escogidos hubiesen sido Pinochet y Olof Palme, también hubiese quedado claro a quién elegir, pero no serviría para demostrar su falacia. Voy a intentar refutar un poco de sutileza una argumentación tan burda.
1. Si hubiesen coincidido en el tiempo, ¿cómo se hubiera tratado el paso de Churchill por el Partido Liberal en una tertulia tan fundamentalista como la de El Gato al Agua?
2. Para mostrar ejemplos de progresistas funestos, es decir de personas que han pretendido cambiar la sociedad con resultados nefastos, podían haber escogido a Fidel Castro, Mao o Pol Pot. Stalin no intentó reformar nada, quiso mantener el régimen de Lenin, quiso continuar, conservar. Era un conservador, funesto, eso sí.

A los emisores de SPAM

Estimados señores:
Es cierto, mi titulación académica no me ha ayudado a conseguir mejores trabajos, no puedo permitirme comprar relojes de lujo auténticos, la tengo pequeña y encima no se me levanta. Sin embargo soy feliz y no necesito su ayuda.

P.D. No entiendo quién puede pensar que necesito credenciales plásticas.

El Mundo

Juan José Millás ganó el premio Planeta com esta novela aparentemente autobiográfica. Como no estoy al día de su vida particular, lo dejo en aparentemente. Me han gustado mucho los fragmentos en los que explica su infancia y adolescencia. Me han gustado poco los fragmentos en los que explica suedad adulta. Quizás la culpa es mía, estoy preparado para las alucinaciones de los niños, pero no para las delos mayores.

Fundación y Tierra

Tras el paréntesis de Pomponio Flato, he leído el quinto libro de la serie Fundación. Tal vez es que me ha cogido un poco cansado, pero me ha gustado bastante menos que los anteriores. Para empezar, la descuidada traducción. Mis conocimientos de inglés son mínimos, pero si veo que al mismo planeta se le llama Anacreonte en libros antreriores y Anacreon en éste, me hace suponer que el traductor del quinto libro ni tan sólo se ha tomado la molestia de leer las anteriores traducciones. Con semejante desidia, mala puede ser la traducción.
Por otra parte, la tercera vuelta de tuerca resulta ya cansina: un Fundación que es controlada por una Segunda Fundación que es controlada por Gaia que es controlada por la Tierra / Luna ...
Para acabar, la sucesión de mundos visitados que remedan los viajes de Gulliver. Dan la sensación de que Asimov tenía que llenar, por contrato, un montón de páginas y lo hizo de cualquier manera.