Tras los resultados electorales, no he tenido más remedio que vomitarla:
- Los que dicen que la opción independentista ha fracasado. La torta se la han dado las derechas "independentistas". ERC ha subido mucho, CUP ha irrumpido con fuerza. A CiU le ha salido mal el farol y SI ha desaparecido. Lo comido por lo servido.
- Los que dicen que el independentismo ha obtenido una victoria "aclaparadora". Lo pongo en catalán porque la victoria abrumadora sólo la pueden ver desde una óptica muy estrecha, catalófona, por supuesto. Sumad votos de los que se han manifestado en contra de la independencia. Sumad votos de los que se han manifestado a favor de la independencia más los votos de los que se han manifestado a-favor-de-las-estructuras-de-estado-el-pueblo-será-lo-que-quiera-y-mis-juventudes-gritan-independencia-por-los-campos-de-fútbol-pero-yo-no-lo-digo-para-no-cabrear-a-la-caixa. No hagáis más trampas y no suméis a los que han dicho que deberíamos poder votar un referéndum sobre la independencia, pero no han dicho qué deberíamos votar en él. Descontando partidos extraparlamentaris, sale un 51-37. Una independencia con ese resultado no se proclama ni el el soñado Quebec.
Pues, eso: y mis cojones treinta y tres.