miércoles, 30 de noviembre de 2011

La crisis y el empleo.

Hace unos años, las empresas de telefonía, financieras y de televisión de pago, entre otras, se desvivían por captar nuevos clientes. Asesorados por expertos formados en las más prestigiosas escuelas de negocios, realizaban ofertas espectaculares a los clientes de la competencia dejando con cara de tonto a su clientela fiel. Mientras tanto, mi frutera, como no había podido hacer másteres, se empeñaba en tratar mejor a sus clientes de toda la vida. Para éstos añadía alguna pieza después de haber pesado la bolsa, le recomendaba las mejores ofertas o regalaba alguna mandarina. Si te veía con una bolsa de otra frutería, eso sí, ponía un poco de mala cara. Con los clientes que no conocía, el trato era correcto, pero mucho menos generoso.
Ahora, la empresa de telefonía con mayor cuota de mercado parece haber cambiado de estrategia y empieza a hacer ofertas especiales para los clientes que ya lo son. Supongo que, con la crisis, ha tenido que prescindir de los expertos de antes y ha tenido que contratar a mi frutera.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Las reglas del juego.

Después de conocerse las primeras estimaciones de resultados de las elecciones del 20 de noviembre, oí  a dos vencedores secundarios quejarse del sistema electoral. Rosa Díez se quejaba amargamente de que el sistema electoral había perjudicado a su formación claramente. Es bien cierto que los diputados de UPyD son los más caros del Congreso Aunque peor es el caso de Equo, que con 215000 votos se ha quedado fuera mientras cinco formaciones con menos votos recogerán actas de diputados. El otro político al que oí quejarse fue Iñaki Antigüedad, el cabeza de lista por Bilbao de Amaiur. En este caso su queja era de mayor calado, puesto que exigía que los votos de las tres provincias de la comunidad Autónoma Vasca más Navarra fueran por otro lado, el eufemismo de "derecho a decidir" para no decir autodeterminación.
Interesante el artículo publicado en La Información. Hacen un ejercicio de política ficción calculando el reparto de escaños en un sistema de circunscripción única. A algunos les sorprenderá comprobar que los grandes beneficiarios no son los partidos nacionalistas, sino los dos grandes partidos. También han intentado hacer el ejercicio contrario, calcular los resultados en un sistema de circunscripciones unipersonales, como el británico. El resultado de este ejercicio es necesariamente falso, como ellos mismos avisan, porque para arrojar resultados correctos necesitaríamos saber cuales serían las 350 circunscripciones.
¿Tiene razón el titular al afirmar que en una circunscripción única todos los votos valdrían lo mismo? Si. ¿Tiene razón al afirmar que ésta es la única posibilidad de todos valgan lo mismo? No. Lo que hace injusto al sistema electoral español no es la existencia de diferentes circunscripciones, lo que lo hace injusto es que las diferentes circunscripciones tengan tamaño distinto y, sobre todo, que los diputados asignados a cada circunscripción no sean proporcionales al número de votantes. El voto de un turolense vale más que el voto de un madrileño.
Necesitamos unas reglas de juego justas, pero existen muchas posibles  reglas de juego justas.

viernes, 18 de noviembre de 2011

La Gitanilla.

No voy a enmendar la plana a los doctos profesores de literatura que señalan ésta como una de las mejores Novelas Ejemplares de Cervantes, pero a mí no me ha gustado. Supongo que mis prejuicios han influido mucho: enamorarse de una niña de quince años me parece pederastia, calificar a todos los gitanos de ladrones me parece racismo, que el único gitano honrado resulte no ser gitano me parece mayor racismo, que se perdone un homicidio por la buena cuna del asesino me parece indignante...Pero mis prejuicios no han sido lo único, Lolita me gusta a pesar de la pederastia, Ripley me gusta a pesar de su falta de escrúpulos, Quevedo es racista y me gusta.O sea, que hay algo más que me la hace desagradable, quizás la absurda trama, quizás los cantares insertados que acaban de romper el ritmo narrativo. No sé, pero no creo que sirva para aficionar a los lectores noveles.

martes, 15 de noviembre de 2011

Ivanhoe

.Conocía el personaje por la película, como todos, y por algunas "adaptaciones para niños", como casi todos. Así que sabía que ganarían los buenos, que el protagonista se casaría con la guapa de su clase social y que los malos recibirían su castigo. Aún así, decidí leer este libro porque ya me he llevado alguna agradable sorpresa con los clásicos de aventuras; por ejemplo Los Tres Mosqueteros. Muy interesante resulta el prólogo, donde el autor explica algunas de las "trampas" de la novela histórica. y compruebo, como demuestra el boom de hace unos años, que las mismas trampas siguen siendo eficaces: la defender la libertad, atacar a la iglesia, violencia, unas gotas de humor, algún anacronismo aceptado y no contradecir demasiado los tópicos de la época en que se escribe. Eso sí, a diferencia del boom de haca diez años, esta vez los templarios son los malos. Quizás ahora costaría que un preadolescente la leyera, pero una nueva versión cinematográfica con una lady Rowena y una Rebecca guapas volvería a arrasar en las taquillas.

jueves, 10 de noviembre de 2011

No todos pierden con los recortes.

Hace 50 años, cuando España era un país subdesarrollado, se empezaron a construir en Cataluña las primeras autopistas. Muchas de las concesiones deberían haber caducado ya, pero se han ido prorrogando a cambio de rebajas a corto plazo en el precio de los peajes. Hoy en día, los catalanes somos los que más peajes pagamos de España, argumento que utilizan los nacionalistas catalanes para denunciar la discriminación del Estado Español hacia Cataluña. Pocas veces recuerdan que los principales accionistas de las autopistas, y beneficiarios de que no se mejoren las carreteras alternativas, son también catalanes.
Ahora, empujado por la crisis, el Consejero de Salud de la Generalitat de Catalunya, está practicando importantes recortes en la sanidad pública. De estos recortes se están beneficiando unas arraigadas sociedades catalanas: las mutuas. No sé si dentro de unos años, cuando la economía haya mejorado, en Cataluña tendremos la ratio más baja de gasto por habitante en sanidad pública, los nacionalistas se quejarán por ello y las mutuas engordarán sus resultados gracias a estas carencias.

martes, 1 de noviembre de 2011