martes, 25 de agosto de 2020

Estaba muy despistado.

Ayer encontré un whatsapp que le envié al entrenador de mi hija el 7 de marzo. Le decía que habían suspendido la carrera que pensaba correr el 15 y que podía contar conmigo para hacer de delegado.

Me contestó que "perfecto".

¿Éramos las dos únicas personas que afrontábamos con tal ingenuidad el coronavirus?

No hay comentarios: