lunes, 26 de enero de 2015

Llegan buenas noticias desde Grecia.

Estoy ilusionado con el auge de Podemos, pero, lo reconozco, también me da algo de vértigo que lleguen al poder. Como nos advirtió George Orwell, me da miedo que los cerdos acaben caminando a dos patas y bebiendo whisky. Por ese motivo, por razones totalmente egoístas, me parece una gran noticia la victoria de Syriza en Grecia. Si funciona, me confirmarán que Podemos puede ser una solución a la cenagosa política española. Si no funciona, los que lo sufrirán serán los griegos. Y, en todo caso, conviene recordar que la revolución soviética propicio los mayores avances. sociales en los países occidentales, aunque a los rusos no les fue tan bien.

miércoles, 14 de enero de 2015

El recurso a la autoridad.

Cuando se debate alguna cuestión, un recurso frecuente es acudir a una autoridad: "como dijo Patatín ...". Seguramente Patatín era una persona que sabía mucho del tema que se discute, pero siempre se podrá argumentar que "sí, pero Patatán...". Porque, claro, Patatán también sabía un montón. De este modo, la conversación puede discurrir por cauces civilizados y resultar enriquecedora para todos los intervinientes y escuchantes que podrán completar lo que dijo Patatín con lo que dijo Patatán y modificar su opinión sobre el asunto tratado.
¿Qué puedes aportar u oponer a alguien que argumenta "Dios dice..."?.

sábado, 10 de enero de 2015

Lecciones del fútbol.

¿Cuántos seguidores colchoneros dejaron de serlo cuando miembros del Frente Atlético asesinaron al aficionado del Depor?
¿Por qué hay gente que piensa que las salvajadas de los yihadistas puede afectar al numero de creyentes musulmanes?
Cuando tiraron a Jimmy al río, no dijimos que la afición del Atlético era violenta, pero nos pareció evidente que algo estaba haciendo mal la directiva y que debían cambiar algunas cosas. No digo que la musulmana sea una religión asesina, pero me parece evidente que algo están haciendo mal sus líderes y que deben cambiar algunas cosas.

jueves, 8 de enero de 2015

Con lo que nos ha costado.

Nos ha costado dos mil años civilizar a los integristas cristianos, no vamos a dejar que vengan los integristas musulmanes a joder la marrana.

lunes, 5 de enero de 2015

El Barça jugó donde los vascos.

Esta mañana, en la edición web del Regió7, periódico local de Manresa, me he encontrado esta noticia.


Quiero ser benévolo y pensar que el redactor sabía que la Real Sociedad es de San Sebastián. Supondré que el titular se refería al equipo de baloncesto del Futbol club Barcelona que sí que perdió en Bilbao y que además perdió el día 30 en Santiago y el día 2 en Berlín completando una semana bastante aciaga.

miércoles, 31 de diciembre de 2014

El horror viendo El Resplandor.

Que me perdonen los cinéfilos: nunca había visto El Resplandor. Ayer lo hice por primera vez. Una película de miedo, me habían dicho. Efectivamente: me llevé un susto morrocotudo cuando vi un cartel que ponía "Mártes". Sí, sí, con acento en la a. Comprendo que rehacer el doblaje costaría un pastón, pero cambiar un fotograma se hace con cuatro duros. Que han pasado más de 30 años, hombre.

martes, 23 de diciembre de 2014

¿Sirve para todo el libre mercado?

Lo de la libre economía de mercado es muy sencillo. Supongamos que yo me dedico a fabricar botijos. Para venderlos, necesito que mis botijos sean mejores para los compradores que los de la competencia. Y aquí, "mejores" puede significar muchas cosas: que sean más bonitos, que duren más, que refresquen mejor el agua o que sean más baratos. El que no sea capaz de hacer botijos mejores, no venderá y tendrá que cerrar el negocio. La competencia nos obliga a mejorar cada vez más nuestro producto. El resultado es que la sociedad recibe mejores botijos que si sólo hubiera un alfarero fabricante de botijos. El Estado debe controlar un poco el mercado: garantizar que los botijos no explotes si los dejas al sol, que no se empleen materiales tóxicos... Pero si se pasa en su tarea de control y empieza a exigir que la arcilla utilizada cumpla requisitos muy exigentes, llegarán botijos chinos mucho más baratos y nos botijeros de aquí nos quedaremos sin mercado.
Ahora que ya he entendido el funcionamiento de la economía libre de mercado en productos simples, como el botijo, intentaré entenderlos en productos un poco más complejos. La electricidad, por ejemplo. Frecuentemente, se presentan en mi casa unos jóvenes que, para visitarme, se han puesto corbata por segunda vez (la primera fue en la ídem comunión). Me piden que les enseñe mis facturas de la luz para comprobar si se me han aplicado correctamente los descuentos. ¡Qué chicos más majos! ¡Cómo se preocupan por mi peculio! Se las enseño y, ¡tachán!, estoy pagando de más. Si me paso a otra compañía suministradora, pagaré menos. Un cambio así se debe meditar y empiezo a hacer preguntas.
- ¿Cambiar la instalación será muy caro?
- No hay que cambiar la instalación, seguirá usando la misma.
- ¿Me llegarán mejores electrones?.
- Los electrones son todos iguales.
- ¿Me llegará más energía?
- No, sólo llega la energía que gasta.
- ¿Habrá menos cortes de suministro?
- Eso depende de la red de distribución, no de la compañía que a usted le suministra.
Así pues, para vender más, las compañías que venden electricidad no tienen que mejorar las instalaciones de los clientes, no tienen que mejorar el producto, no tienen que ofrecer más producto, no tienen que mejorar el servicio postventa. Sólo tienen que escoger los vendedores más hábiles. No acabo de entender en qué beneficia a la sociedad el libre mercado en el suministro de electricidad. Por lo que parece, las propias empresas tampoco entienden que el libre mercado sea la mejor solución. Prueba de ello es el interés que tienen en contratar exgobernantes para que el Estado intervenga, y mucho, en ese mercado.