Una vida de mierda.

Un tsunami provoca en Indonesia 1.500 muertos y 900 desaparecidos.

Un oleoducto explota en Nigeria y mata a 85 personas.

Un accidente ferroviario provoca 3 muertos en Lyon.

El paro sube en España hasta el 19%.

Se anuncia una huelga en el servicio de recogida de basuras de mi ciudad.

Las obras de la variante que comunicará mi barrio con el norte de la ciudad se alargarán seis meses más.

Se me han acabado las capsulas de café y tengo que desayunar con soluble.

Definitivamente, esta vida es una mierda.

¿Cómo se para la ultraderecha?

La verdad, no tengo ni puñetera idea. Y, viendo su ascenso en todo el mundo occidental, ni yo ni nadie. Sí que estoy bastante seguro de que lo que no sirve es llamar tontos a sus votantes. Cada vez que veo algún mensaje en RR.SS. diciendo algo parecido a esto (así o con más sutileza) 

me enfado un poco. La democracia se basa en el principio "una persona, un voto". Si pensamos que hay gente que vota mal, nos empezamos a cargar la democracia.

Sería más útil investigar qué lleva a alguien a votar a la ultraderecha. Los votantes, aunque tengamos algún matiz altruista, somos esencialmente egoístas. Si en un barrio obrero la ultraderecha obtiene muchos votos, es porque la izquierda, el destino "natural" de esos votos, no ofrece soluciones a los problemas de esos votantes. O, peor aún, ni siquiera habla de los problemas de esos votantes. Si tengo humedades en casa y tengo que escoger entre el que me propone arreglar la antena y el estafador que me vende un rodillo mágico contra las humedades, escogeré al estafador.

Lecciones de la invasión rusa.

La primera medida de Europa Occidental, cuando algún país se porta mal, es imponer sanciones económicas. A pesar de las vueltas que ha dado el mundo en el último siglo, seguimos siendo los más ricos. Podemos hacer mucho daño cerrando nuestra cartera. En ese convencimiento estábamos, cuando llegó la invasión de Ucrania y descubrimos que dejar de comprar no es tan fácil.

Ahora somos conscientes de que, si queremos dejar de comprar gas o petróleo a Rusia, debemos comprarlo a países poco democráticos como Argelia, Qatar o Arabia. O a países que usan técnicas poco respetuosas con el medio ambiente como el fracking. Hasta hemos descubierto que, mientras cerrábamos minas de carbón europeas, seguíamos comprando y quemando carbón ruso.

De esta crisis deberíamos salir convencidos de que Europa necesita más autonomía energética. Puesto que el azar geológico no ha sido generoso con este extremo de Eurasia, la única solución es volcarnos en la producción y el transporte de energía renovable. Y eso va por todos. Desde los que quieren seguir quemando petróleo porque a corto plazo es más barato hasta los que quieren evitar los parques eólicos o las MAT porque les estropean el paisaje.

La aristocracia era esto.

- Mira qué buena está ésa.

- Pero, Duque, que tiene 12 años.

- Pero, ¿a que aparenta 9?

El chiste lo explicábamos a principios de los 90, cuando juzgaron y condenaron al Duque de Feria por pederastia.

Esta semana nos hemos enterado de que el hijo de aquel duque se enriqueció con la intermediación de mascarillas en lo más duro de la pandemia con unos márgenes desorbitados. No sé si lo que hizo fue legal, pero tengo claro que fue inmoral.  

"La fiscalía, ya sabes, todos son de izquierdas". Eso ha dicho Luis Medina. Manifiesta, como su padre en el chiste, su convencimiento de que ellos, y solo ellos, tienen derecho a  hacer lo que quieran.

El gobierno toma medidas.

Hace unas semanas, se hacía público un vídeo en el que aparecían unos guardias civiles golpeando a un inmigrante subsahariano que acababa de saltar la valla fronteriza de Melilla.

https://www.youtube.com/watch?v=64SxHQgWQ-A

El Gobierno ha tomado medidas para que no vuelva a suceder. El acuerdo con Marruecos sobre el Sáhara es la solución. Los inmigrantes subsaharianos seguirán recibiendo golpes, eso volverá a suceder. Pero se los darán los policías marroquís y aquí no los veremos.  

Hasta que Mohamed VI tenga otra reclamación que hacer. 

No valgo para futurólogo.

Suerte que soy perezoso.

Llevaba unos días pensando que tenía que escribir una entrada sobre Núñez Feijóo. Quería decir que me parecía una buena noticia su acenso a mandamás del PP.  Mi argumentación se basaba en valorar las formas. Frente a las críticas que calificaban las formas de anecdóticas, puesto que sus políticas son como las del resto del PP, mi tesis era que había que valorar positivamente esas formas. En el clima de crispación fomentado por tantos líderes populares, que alguien viniera a defender con amabilidad sus posturas, aunque a mí no me gusten, me parecía muy útil para desenrarecer la política actual.

Y va y bendice el pacto con Vox en Castilla y León.

A mi hijo le están haciendo bullying.

 A mi hijo le están haciendo bullying.

Algún día lo solucionaremos, pero ahora me preocupa mañana. Mañana saldrá al patio y se encontrará con su acosador. No sé qué aconsejarle. 

Puedo decirle que no se separe de sus amigos, que ellos le protegerán. Pero mi hijo es nuevo en el colegio. No tiene amigos muy íntimos. Y sus amigos también tienen miedo del matón. Lo más probable es que, cuando el agresor vaya a por mi hijo, sus amigos se aparten y mantengan una distancia prudente.

También he pensado decirle que le plante cara. Los abusones son abusones porque los demás les tienen miedo. Si mi hijo no rehúye la pelea, el otro dudará. Los demás se darán cuenta de que se puede vivir sin estar amedrentados y poco a poco, el matón dejará de ejercer su despotismo en el patio. Pero el rival es mucho más fuerte. Si mañana mi hijo es valiente, volverá a casa con la nariz rota.

Quizás sería mejor recomendarle que sea prudente. Que, cuando se acerque el agresor, se avance y le ofrezca el bizcocho que lleva para desayunar. Volverá a casa con la nariz entera, pero las próximas semanas, o hasta final de curso, se quedará sin desayuno.

O que no haga nada. Se llevará un empujón, alguna patada cuando esté en el suelo. Pero el otro se cansará de pegar cuando no encuentre resistencia y no le hará mucho más daño.

También he intentado prepararle una especie de discurso. Una lista de argumentos para que se los explique al matón y le convenza de que no ganará nada maltratando a su compañero de clase.

No os preocupéis por mi hijo. Todo esto es ficción. O casi.

A UCRANIA LE ESTÁN HACIENDO BULLYING.